Pequeño Cuento de amor

[Icewizard]

Primer encuentro

-Nada, no importa- dijo mi papá- Vayamos todos a dormir un poco- agregó algo mas tranquilo.

-Está bien- dije

Cuando llegamos a casa Sinna me dijo por lo bajo.

-Prométeme que no te iras cerca de muralla mañana-

-No puedo, quedé con Erwe de ir- y no deje que siga.

Esa noche me costó dormir algo, estaba muy nerviosa. La falta de visiones de mi papá era muy poco frecuente, solo sucedía con algunos enemigos. ¡Eso es! Alguna guerra se debe estar avecinando, aunque se supone que mi padre lo vería.
A la mañana siguiente, luego de vestir mi túnica y tomar mi báculo, le hice una visita a Erwe. Ella estaba algo dormida, pero le dije que era muy necesario ir fuera de La Gran Muralla antes de lo necesario. Tomó su arco y salimos a esperar que sucediera algo.
Pasaron horas, mucho calor pero nada interesante sucedía. Los animales corrían de un lado para otro impacientes. ¡Me iba a quedar dormida si nada sucedía! Decidí que lo mejor seria salir del bosque de la muralla y llegar al puesto de avanzada cerca del fuerte Herbred. Pero nada sucedía aun. Erwe ya estaba cansada y dijo.

-Bueno Gal, te dije que te acompañaría pero… no hay nada que hacer. Me voy a casa.-

-Bueno, nos vemos más tarde- contesté

-OH vamos Gal, no pasará nada raro-

Pero acto seguido que ella lo dijera, vi algo a lo lejos. Una sombra, pero no era de ningún animal del bosque.

-No es un animal, tengamos mucho cuidado.- dijo Erwe toda alerta.

-Lo se-

Nos adelantamos unos pasos hasta que Erwe se negó a avanzar más. Yo seguí unos metros y le vi. Era un elfo oscuro, un pequeño elfo oscuro bárbaro. Tenía los ojos rojos rubí, su pelo era azul pero más claro que su piel. Podría decirse que su piel era algo mas morada. Su armadura era muy pobre, pieles de animales. No debía de ser muy bueno en guerra.

-¡Gal cuidado!- gritó Erwe y lanzo una flecha hacia el bárbaro

Pero yo se la desvié con mi magia. No quería que resultara herido, algo realmente raro. Me educaron para acabar elfos traidores pero ahora, estaba defendiendo a uno de las flechas de mi amiga. Mi amiga, que se había quedado helada ante mi reacción.
Esperé a que el elfo se moviera para atacarnos, pero nada sucedía. Estábamos ahí parados mirándonos el uno al otro. Le salude con la mano, pero lentamente. Él me respondió igual de lento. Me sentí bien cuando lo hizo, pero estaba realmente confundida.
Una idea fugaz me atravesó la mente. Pero me estremecí con pensarlo, era imposible y no iba a ser capaz.

-Gal, se acerca el ejército del rey.- dijo Erwe muy preocupada- Te están buscando- agregó

¿Por qué me buscaban? Sabían que vendría con Erwene a muralla. ¿Tendrá que ver con la falta de visiones? Pero esas preguntas fueron tapadas con otra cosa. Un enorme ejército de elfos oscuros venía.

-Erwe…- solo pude susurrar debido al espanto.

Luego el elfo habló, pero no logre entenderle. Era otro idioma.

-Es hora de volver, Gal-

-Pero…- no termine la frase, no estaba segura de cómo decirle que quería seguir con el elfo.

Y todo sucedió de lo más rápido. El elfo era muy ágil, no cabe duda y uso esa agilidad para acercarse. Se estaba acercando mucho. Y sentí sus labios en mi mejilla. Luego me murmuro algo que no logre entender

-Uf que feo, muere elfo- dijo Erwe mientras le apuntaba.

Pero esta vez me enoje.

-¡No!- le grite a Erwe- Vamos-

Y comenzamos a correr, pero yo de vez en cuando volvía la cabeza atrás para verlo.
Nos escabullimos y entramos al reino. Según Erwe ya estábamos a salvo, pero en realidad solo me metí en más problemas. Como supuse, mi papá me estaba esperando furioso en casa.

-Te fuiste cuando te hicimos prometer que te quedarías.- acusó

-Nunca prometí quedarme, de hecho, prometí irme con Erwe.- me defendí

-Casi me da un ataque al corazón hija, deberías ser más considerada con este viejo- dijo con un tono de tristeza.

-Ni que fueras tan viejo pa.- dije

-Es verdad, 325 años no son nada para los elfos.- dijo sarcástico

-Ya ves. Jajaja-

-Bueno, pero no vuelvas a salir sin avisarme.-

-Este… Papá, te avise hace 1 semana- ¿Qué le estaba sucediendo?

-Ya sabía, te estaba probando…- dijo

La puerta sonó con dos suaves golpes. Debía de ser mi tía. Mi papá abrió y le saludó, luego mi tía dijo.

-¿Dónde esta mi sobrina favorita?- en voz muy alta

-Acá estoy tía- dije, todo era broma ya que solo estábamos divididas por una pared, solo debía girar a la izquierda y ya.

Cuando me vio me dio varios besos en la mejilla. Ni que me hubiera ausentado años.

-Eh, ¿desde cuando tanto escándalo? Solo paseaba por el bosque. De verdad- Bueno, solo lo primero era verdad, lo otro no.

Charlamos un rato, hasta que una idea se me cruzo en la mente. El elfo. Me había dicho algo y no le entendí, pero gracias a dios mi abuelito Guaje creo una biblioteca de lo más extensa. Ojalá que tenga lo que busco.

-Si me disculpan- dije mientras me levantaba- Necesito visitar al abuelito. Nos vemos más tarde- agregué.

La biblioteca de mi abuelo era muy útil para cualquiera que estudie. Tenía libros por doquier y todos eran interesantes. Cuando llegué Guaje estaba cerrando la puerta con llave.

-¡Abue!- grite- ¡No cierres! Necesito ver un libro.-

-¿Quién sos y que le hiciste a mi nieta?- dijo sarcástico- ¿Desde cuando necesitas un libro a estas alturas del año?-

-OH vamos, si me gustan los libros. Menos los de estudios- y sonreí- ¿Puedo entrar abue?

-Mm.- dijo

-Por fa.- y le di un besito en la mejilla para terminar de convencerle.

-Bueno, bueno. Pero no tardes en agarrar el libro. Por cierto ¿qué libro necesitas?-

-Algo sobre historia…elfos oscuros- dije- Sobre su idioma, me gustaría aprenderlo. Simple aburrimiento.-

-Esta bien, al fondo a la derecha, cuarto estante. Ahí encontraras algo- señaló

-Gracias abuelito- y le agradecí con otro besito.

Entre en la biblioteca y era mas inmensa de lo que me acordaba, como dijo mi abuelo, no vengo hace mucho tiempo.
Encontré el libro rápidamente gracias a los avisos de Guaje. Estaba lleno de polvo y tenia un escudo ignita.

Cuando lo abrí, la imagen me sorprendió. Muchos dibujitos raros alrededor de una imagen llena de colores brillantes. No había forma alguna y lo único que entendí fue lo que algún otro debió haber escrito antes.

“Historia Ignita, lenguaje”

Continuara

[Ryech214]

Muy bueno, me gusta, lalalalala. ¿Tiene buena memoria? Porque tiene que acordarse lo que le dijo el elfo oscuro.

[AbouJaria]

Te dejo mi nombre (Azhares o L' Orient) por si te sirve, si no, no hay drama. Linda historia eh! Felicitaciones

PD: Lo que me llama mas la atención y me gusta en cierto sentido, es que esta escrito desde la vista de una mujer, eso me llamo la atención por que eh leído muy pocas historias contadas por "chicas". Saludos

[Icewizard]

Originally Posted by Azhares

Te dejo mi nombre (Azhares o L' Orient) por si te sirve, si no, no hay drama. Linda historia eh! Felicitaciones

PD: Lo que me llama mas la atención y me gusta en cierto sentido, es que esta escrito desde la vista de una mujer, eso me llamo la atención por que eh leído muy pocas historias contadas por "chicas". Saludos

Grax por el nombre pero ya eleji uno que me gusto como quedo.

Jeje, es verdad... pocos escriben del lado de la "chica". Me encanta sorprender a la gente (?)

[Icewizard]

Búsqueda

Meses mas tarde.



-OH vamos… solo quiero ir con los mercaderes del fuerte. Es un favor que me pidieron- se quejó Erwene.

-Lo siento, no puedo dejarlas pasar a ninguna de las dos. Son las órdenes del capitán.- repitió el guardia de la muralla.

-No importe Erwe, volvamos a casa- mentí pero Erwe no se dio cuenta y el guardia si.

-No sirve hablar con el capitán, el recibió las ordenes de su padre.-

-Yo nunca dije que iba a hablar con el capitán. Vamos Erwe.- dije

Y nos marchamos. Al finalizar el breve viaje nos separamos cada una para un lado distinto. Cuando me acosté en mi cama, como hacía ya varios meses, me acordé que la muralla tenía un pequeño pasaje secreto para escapar en caso de invasiones. Solo debía esperar a bien entrada la noche, cuando los guardias están totalmente aburridos y sus reflejos se vuelven mas lentos. Preparé un plan hasta quedarme dormida.
Me desperté toda sudada a causa de la pesadilla. Volví a soñar que le veía y que nos marchábamos juntos, hasta ahí era un sueño fantástico pero luego montones de guerreros nos rodeaban y nos separaban. Al verle irse mi corazón comenzaba a dolerme, cada vez más y más, recordar también dolía. Era mas claro que el agua, debía volver a verlo pero no sabía que hacer después. ¿Debía escapar? ¿Debía enfrentar a mi padre? ¿Podría confiar en mi tía y en mi mejor amiga o debía elegir entre él y ellas? Esas preguntas llegaban pero siempre sin respuestas.
A la tardecer, en nuestro asiento de la plaza principal, le dije a Erwe de mi idea.

-Es una locura, pero te ayudare… no tiene sentido detenerte, de todas formas siempre haces lo que te propones.- dijo tranquila.

-Gracias, ¿nos vemos a media noche en el pasaje?- pregunté

-Si, claro... ¿Estas segura de tu decisión?-

-Si. Totalmente segur.- dije

-Bueno pero- dudó un instante- ¿Cómo se comunicaran? ¿Dónde se verán?-

-No tengo ni la menor idea, pero le buscare hasta el fin de mis días si es necesario- afirmé

-Hay Gal, no deberías desperdiciar tu vida.-

-No la desperdiciare, no más.-

Erwe quedó en silencio. Milagros de la vida.

-Es hora de prepararme. Nos vemos a la media noche.- y me fui a mi casa veloz.

Me prepare un bolso no muy pesado, lo necesario para pasar las noches y para comprar alimentos cerca de los fuertes. Pensé que quizás extrañe a mi familia, pero me di cuenta de algo. No tendría que vivir en la nada, podía vivir en mi reino con la persona que amaba.
Le di vueltas al asunto durante el viaje. Cuando llegue al escondite Erwene me esperaba. Estaba tapándose la cara.

-Te voy a extrañar amiga.- dijo y entendí que Erwene lloraba.

-OH Erwe, volveré- le di un abrazo- Tengo un plan.-

Nos despedimos por un rato y marché en su busca.

Pasó una semana. Lo único que encontraba eran feroces fieras hambrientas. Busqué en los alrededores del límite de Ignis, en los bosques cercanos, en la playa del castillo enemigo, etc. Pero aun así no le encontré. El sol abrasador era insoportable, sus rayos me quemaban todo el tiempo.
Comencé a desesperarme, incluso creí que volvería. Cada vez era peor. Desesperada fui a recostarme contra alguna piedra, el sol era insoportable. Traté de dormir, pero era difícil. Cuando por fin comenzaba a dormirme, un ruido extraño provino de un lugar cercano. Seguramente era algún lobo perdido, así que lo ignore. Volví a cerrar los ojos…
No se si era un sueño o que, pero comencé a escuchar una voz, dulce y suave.

-¿Podría yo tener tanta suerte?- se dijo así misma la voz. Era un hombre, pero no me animaba a abrir los ojos.- Estas despierta, lo sé.- me dijo

Abrí los ojos lentamente y lo vi. Era el elfo con el que soñé durante meses, el elfo por el cual me fui de mi hogar para buscarle. Ahora lo tenía frente a mí, su piel morada, sus ojos rojos rubí, su despeinado pelo color cielo. Recordé todo lo que aprendí de su idioma y trate de hablarle.

-Hola, ¿podes entenderme?- pregunté

-Claro… ¿cómo es eso posible? No sabía que hablabas en mi idioma.- dijo

-Estudie por meses, fue sencillo… no es tan diferente al nuestro.-

-Ajam, ¿te molesta si nos vamos? Eres realmente afortunada, si te hubiera encontrado algún compañero mío…- dejo la frase sin terminar y movió la cabeza negando algún pensamiento suyo.

Yo asentí, tome mis cosas y me guió hasta la playa, pero como estaba impaciente le dije.

-¿A dónde vamos?-

-OH, es mi pequeño escondite… estarás a salvo de… mis hermanos- dijo


Continuara

[Icewizard]

Revivo el post

[piritio12]

pon el nombre de lardos men te lo agradeceria muy buea historia por no decir exelente

[Ryech214]

Muy bueno, seguí así. xP

[Icewizard]

Ya puse nombre lalala asi que mañana se enteran cual eleji

[Icewizard]

El plan

-¿Falta mucho?- pregunté ansiosa después de caminar varios kilómetros. Él, obviamente me guiaba y yo le seguía por detrás.

-Ya estamos llegando a la playa, tranquila bonita.- dijo

Me quede callada. Me dijo bonita, nunca nadie me dijo así. Bueno, me lo han dicho por decir en bailes que mi padre ha organizado pero nunca me lo han dicho así, parecía sincero.

-Mmm, por cierto… no se tu nombre-

-Mi nombre es Treeck- dijo mientras giraba su cabeza para sonreírme. Mi corazón comenzó a latir muy rápido.- ¿El tuyo?- preguntó

-El mío es Galathriel. Dime Gal-

-Claro, como quieras bonita- y volvió la mirada hacia el camino.

Breve silencio.

-Y… ¿pasas mucho tiempo cazando elfos?- pregunté

-No me gusta venir a estas zonas, me gusta estar en el reino.-

-¿Y por qué te vi en los alrededores de un fuerte?-

-Bueno… me habían ofrecido una gran recompensa de oro si lograba asesinar a una cantidad de elfos, pero cuando te vi me di cuenta de mis errores y me fui al reino. Le explique al que me ofreció que no quería seguir, le devolví parte del oro que me dio.- suspiró- Podría decirse que soy algo pobre, sobrevivo día a día cazando animales.-

Otro breve silencio.

-¿Qué pasa? ¿Te quedaste sin preguntas?- dijo curioso - ¿puedo hacer yo unas preguntas también?- agregó

-Claro, dispara-

-¿Qué hacías cerca de un fuerte con tu amiga?-

-Bueno… estaba esperando que suceda algo interesante…-

-¿Y sucedió algo interesante?-

-Algo así.-

Caminamos un rato largo sin hablar. Luego llegamos a un pequeño campamento abandonado en forma de semi circulo y apuntaba al mar. Había tres carpas con un pequeño techo, otro par de carpas tiradas al suelo por completa, agujeradas. Luego había unas tiendas que parecían puestos de vendedores.

-¿Es aquí?- dije

-Si, no es lo más cómodo que hay, pero este lugar es bastante secreto y no creo que nos encuentren mis hermanos.-

-Me parece bien, ¿te vas a quedar aquí?- dije esperando que no se notara que me moría de ganas de estar a su lado.

-Si eso queres, puedo irme, conozco muchos lugares.-

-¡No!- O que bien… se me escapo ese grito- Quédate- dije mas tranquila.

Se rió de mi expresión y dijo

-Bueno, vos dormís ahí y yo acá.- dijo mientras señalaba los lugares. Me indico que durmiera en una de las tiendas con techo mientras que él se quedo en la de al lado.

-Qué duermas bien- me dijo una vez listos para dormir.

-Gracias, vos también.-

Estaba nerviosa, no podía creer que fuera a pasar la noche con él. Estaba feliz, pero extrañaba a mi familia.
Entre varios pensamientos me quede dormida. A la mañana siguiente me despertó suavemente.

-Bueno días dormilona, siento tener que despertarte pero…- dejo la frase a la mitad.- No me puedo creer que nos hayan encontrado, lo siento.-

-¿Qué?- no entendía nada.

-Mis hermanos me rastrearon después de que nos separamos, ahora vienen hacia acá.- pensó- No se que hacer.-

Era el momento ideal para poner mi plan en marcha.

-Ven conmigo, a mi reino.-
-¿Cómo?- preguntó y la duda atravesó su rostro.

-Usemos estas mantas de capas, pasaras desapercibido frente a los guardias, creeme.-

-¿Confías lo suficiente en mí?-

-Si, ¿debería desconfiar?-

-No, es que solo nos vimos dos días y ahora me invitas a vivir en mi reino opuesto.-

Un estruendo le calló, a lo lejos vi un enorme troll que golpeaba el suelo con sus patas enormes.

-¡Mis hermanos!- gritó. Tomó unas mantas y nuestras cosas. Comenzamos a correr lo más rápido posible.

-¿Qué haré de día? No puedo vivir con las mantas.-

Eso era un problema.

-Lo veré después, no puede ser tan grave como lo que me harían tus hermanos.- me quejé entre jadeos por falta de aire.

-Es verdad, mis hermanos no te darían la posibilidad de escapar.-

-¿Me matarían?-

-Bueno… supongo…- dijo dudativo.

Deje de correr. Me quede en el lugar hasta que se me acercó lentamente, algo nervioso.

-Gal, sonará muy tonto y ridículo pero tengo que decirte que… desde que te vi cerca del fuerte solo puedo pensar en vos. No entiendo que diablos me pasa.- se quedo callado mirando a mis ojos.- Me cuesta estar lejos, ahora mas que antes, de vos.- y se acerco hasta quedar frente a mi, no me había dado cuenta de que era mas alto que yo, aunque no tanto.

-Bueno…- comencé- me siento igual. ¿Qué nos esta pasando?-

Que hermoso es, dijo una voz en mi cabeza. ¿Qué me esta pasando?
No lo ocultes más tonta, este es el mejor momento.

Y apoye mis labios suavemente en los de él. Sentí una fuerte corriente eléctrica recorriendo mi cuerpo desde los pies hasta la cabeza, me sentía muy feliz, nada de lo que me haya sucedido se comparaba con esta sensación. Era algo muy emocionante, algo que comenzó a ser muy adictivo.

-Sin palabras- dijo después de que nos separamos. Luego sonrío sin mostrar los dientes.

Pero rápidamente me devolvió el beso y esta vez mas prolongado. Esa corriente me golpeo de nuevo y también la sentía mas fuerte.

-Vamos a los bosques antes de que nos encuentren tus hermanos.- dije

-Muy bien, vamos mi lady.- y me tomo de las manos y comenzamos a andar hasta mi hogar. Era mejor de lo que pensé alguna vez, ahí esta él tomado de mi mano. Todo me parecía positivo.


Continuara.